Preparando carne a la piedra en casa con una piedra volcánica
Seguro que a más de uno le encanta almorzar o cenar así. Por ello hoy vamos a ir Preparando carne a la piedra en casa con una piedra volcánica para que todos veamos lo fácil que es, lo buena que queda y lo divertida que puede ser la velada haciendo nuestra carne y comiéndola recién hecha bien caliente, sin esperas, a tu gusto de cocinado.
Para ello es fundamental que conozcamos las piedras para carne y que podamos elegir la más adecuada a nuestras necesidades.
Tenemos distintos tipos de piedras aunque la mejor para cocinar es la piedra volcánica sobre todo por las características que tiene en sí, de forma natural. Con esta piedra puedes cocinar la carne al punto que a ti te guste. Además de obtener el sabor deseado, es el placer del aroma mientras se cocina, lo cual despierta aún más el deseo por comer el trozo de carne que estamos asando, por supuesto, como siempre os digo, cuánto mayor sea la calidad de la pieza que vamos a asar, mejor será el resultado.
La piedra funciona acumulando calor fácilmente y poco a poco de forma constante, una vez alcanzada la temperatura, va soltando el calor progresivamente y poco a poco para que nuestra carne quede perfectamente cocinada para nuestro gusto.
Es una forma natural y sana que tenemos, ya que no se necesita añadir ningún tipo de grasa a la piedra. Se hace con la grasa que ya tiene la propia carne. (Puedes pedir a tu carnicero un trozo de grasa que le quita al cortar tu pedido para engrasar la piedra antes de comenzar al cocinado mientras se calienta)
Por ello las mejores carnes para cocinar a la piedra son por ejemplo la pluma, el secreto sobre todo si son ibéricos porque ese poquito de grasa extra le da un sabor más jugoso o un buen chuletón de buey, lo que sea más de tu gusto o cualquier otra variedad del estilo.
Es fundamental sacar del frigorífico al menos dos horas antes de cocinarlo para que el contraste no sea tan grande. También es importante o recomendable, pedir que nos lo corten en trozos un poco menores a 1 cm para que se haga bien y sea más fácil de degustar. Trozos de bocado para que no se queden fríos en el plato y que podamos degustar de la mejor forma de principio a fin nuestra pieza de carne, sea la que sea.
Otra característica que a mí me encanta es que no tienes que anticiparte a pensar cuánto quieres comer, vas cocinando y comiendo según te apetezca. Aunque te aseguro que queda tan rico y es tan divertido, que comerás más de un trozo.
Lo gracioso y divertido es tener cada uno nuestra piedra si es pequeña o al menos tener un par de las grandes para una mesa con varios comensales. Esto es porque tenemos piedras volcánicas para asar carne de distintos tamaños para adaptarlas a nuestros gustos y necesidades.
Espero que os animéis y me contéis vuestras experiencias.
-
Tiene que ser una pasada cocinar así, seguro que las cosas tienen mucho mejor sabor. Me encanta.
-
La carne tiene que quedar exquisita ahí 😍
-
Me encanta la carne cocinada a la piedra, queda súper sabrosa
-
Una tecnica de cocinado ideal para disfrutar de una buena carne. Tengo que hacerme con una de estas piedras. La idea de las pequeñas individuales me parece genial.
-
Que interesante, como debe quedar de rica la carne 😍
-
Muy interesante el artículo. Nunca viene mal conocer este tipo de piedras y para qué sirven. 👏👏👍
-
Pregunta, por poner pegas, si se lleva a la mesa del comedor, no ensucia por el chisporroteo de la grasa de la pieza?
Lo he probado en restaurantes y me encanta, pero en casa...
Gracias!!
14 ¿Quieres comentar la receta?
Deja una respuesta
Te pueden interesar: